Nuestra Señora de Lourdes

Nuestra Señora de Lourdes

Ficha Técnica

  • Fiesta: Febrero 11.
  • Patrona: Francia.
  • Advocación: Aparición.
  • Significado del Nombre: Pueblo de Francia.
  • Aprobación: Santa Sede (Vaticano).
  • Website: https://www.lourdes-france.org/

Historia

Nuestra Señora de Lourdes es el título otorgado a la Santísima Virgen María cuando apareció en Lourdes, Francia.

Lourdes era solo una pequeña ciudad comercial en los Pirineos, en el suroeste de Francia, donde la familia Soubirous vivía en la pobreza. La hija mayor, Bernadette tenía catorce años pero no sabía leer ni escribir.

El 11 de febrero de 1858, Bernadette Soubirous fue a recoger leña con su hermana y una amiga en las estribaciones de los Pirineos en el sur de Francia. Bernadette estaba débil por su asma y se detubvo detrás de las otras chicas.

Cerca del río, escuchó un ruido de pisadas en la gruta al fondo de la montaña. Se volvió para ver una luz brillante y, dentro de la luz, una hermosa dama vestida de blanco. Al acercarse, vio que la dama tenía rosas amarillas a sus pies y estaba sosteniendo un rosario.

Después de que Bernadette se arrodilló y rezó el rosario, la dama desapareció. Tres días después, la dama apareció nuevamente en la gruta, pero solo Bernadette podía verla. La dama le pidió a Bernadette que siguiera yendo a la gruta y, mientras lo hacía, más y más personas la seguían.

El 25 de febrero, la mujer le dijo a Bernadette que cavara en la tierra y bebiera el agua que saldría de su excavación,  cientos de personas la miraban, ella bebió el agua fangosa. Al día siguiente, el agua fluía del lugar donde había cavado y el 1 de marzo, una mujer se curó de parálisis, después de mojar su mano. La señora le dijo a Bernadette que le preguntara a la mujer su nombre.

Cuando Bernadette regresó y le dijo que ella era la Inmaculada Concepción, el sacerdote sabía que las apariciones eran reales porque Bernadette nunca habría escuchado esas palabras.

La última aparición se produjo el 16 de julio y concluyó cuatro años más tarde con un juicio sobre la realidad de las apariciones, en 1862. Hasta el día de hoy, de los casi seis mil relatos de milagros y curaciones en Lourdes, la Iglesia ha reconocido solo sesenta ocho, en las aguas de Lourdes, que todavía fluyen sin fin para millones de peregrinos que visitan cada año.

Oración a Nuestra Señora de Lourdes

Oh María, que te apareciste a Bernardita en la cavidad de la roca; al frío y a las sombras del invierno, tú les trajiste el calor de tu presencia y el resplandor de tu belleza.
Infunde la esperanza, renueva la confianza en el vacío de nuestras vidas, tantas veces sumidas en la sombra, y en el vacío de nuestro mundo, en el que el Mal hace valer su fuerza.
Tú que dijiste a Bernardita “Yo soy la Inmaculada Concepción”: socórrenos, pues somos pecadores. Danos la fuerza de la conversión, la humildad de la penitencia y la perseverancia de la oración.
Te confiamos todos aquellos que llevamos en el corazón y, en particular, a los enfermos o desesperados, tú que eres “Nuestra Señora del Socorro”.
Tú que llevaste a Bernardita a descubrir el manantial. Guíanos hacia Aquel que es la fuente de vida eterna,
Aquel que nos ha dado al Espíritu Santo para que podamos atrevernos a decir: Padre Nuestro que estás en los cielos…

“¡Nuestra Señora de Lourdes, ruega por nosotros!”
“¡Santa Bernardita, ruega por nosotros!”
“Oh María concebida sin pecado original, rogad por nosotros que recurrimos a Vos”.

Oración a Nuestra Señora de Lourdes para pedir salud de los enfermos

¡Oh amabilísima Virgen de Lourdes,
Madre de Dios y Madre nuestra!
Llenos de aflicción y con lágrimas fluyendo de los ojos, acudimos en las horas amargas de la enfermedad a tu maternal corazón, para pedirte que derrames a manos llenas el tesoro de tu misericordia sobre nosotros.

Indignos somos por nuestros pecados de que nos escuches: pero acuérdate de que jamás se ha oído decir que ninguno de los que han acudido a Ti haya sido abandonado.

¡Madre tierna! ¡Madre bondadosa! ¡Madre dulcísima!

Ya que Dios obra por tu mano curaciones innumerables en la Gruta prodigiosa de Lourdes, sanando tantas víctimas del dolor, guarda también una mirada de bendición para nuestro pobre enfermo…(dígase el nombre del enfermo/a).

Alcánzale de tu Divino Hijo Jesucristo la deseada salud, si ha de ser para mayor gloria de Dios.

Pero mucho más, alcánzanos a todos el perdón de nuestros pecados, paciencia y resignación en los sufrimientos y sobre todo un amor grande y eterno a nuestro Dios, prisionero por nosotros en los Sagrarios.

Amén.

Virgen de Lourdes, ¡ruega por nosotros!.
Consuelo de los afligidos, ¡ruega por nosotros!
Salud de los enfermos, ¡ruega por nosotros!

Rezar tres Avemarías.