- Fiesta: Agosto 21.
- Patrona: Irlanda.
- Advocación: Aparición.
- Significado del Nombre: La colina (de María).
- Aprobación: Santa Sede (Vaticano).
- Website: https://www.knockshrine.ie/
- S.S. Juan Pablo II hizo una peregrinación a Knock, visitando el santuario el 30 de septiembre de 1979, conmemorando el centenario de la aparición dándole la aprobación de la Santa Sede. Refiriéndose a Ella como Nuestra Señora del Silencio
- La Madre Teresa de Calcutta visitó el santuario en Junio de 1993. Un millón y medio de peregrinos lo visitan anualmente.
- Peregrinar a Knock es caminar por los elementos básicos de nuestra fe. El centro de todo está la Santa Misa y la confesión. También se hacen las estaciones de la Cruz, muchos rosarios y tiempo de oración.
- Hoy en día y cada año Knock recibe a un millón y medio de peregrinos.
Historia
El 21 de agosto de 1879, Mary McLoughlin, la ama de llaves de la pequeña iglesia parroquial de Knock en el condado Mayo, en Irlanda, caminaba por la capilla rumbo a la casa de la viuda Mary Bryne cuando notó una luz brillante que se asomaba a lo que parecían tres figuras que supuso eran nuevas estatuas que el sacerdote había comprado.
Después de una breve visita, Mary McLoughlin y Mary Byrne regresaron a la rectoría bajo la lluvia. Cuando se acercaron, vieron contra la pared del hastial personas reales: María, San José y San Juan, Nuestra Señora miraba hacia el cielo con las manos ligeramente levantadas.
Mary Byrne dejó a Mary McLoughlin allí y corriendo fue a avisar a familiares y conocidos. Trece personas se unieron a ellas para completar el grupo de quince testigos que constituyen la base del testimonio que Dios quiso dejar allí. Personas de entre seis y setenta años vinieron y presenciaron la visión, entre ellos jóvenes y ancianos, hombres, mujeres y niños.
Los testigos describieron a la Virgen Santa María vestida con una túnica blanca y una brillante corona en la cabeza. Sobre la frente, donde la corona encajaba, llevaba una hermosa rosa dorada en plena floración. Estaba en actitud de oración con los ojos y las manos levantadas hacia el cielo. San José se paró a la derecha de Nuestra Señora. Se volvió hacia ella en una actitud de respeto. Sus túnicas también eran blancas. San Juan estaba en la izquierda de Nuestra Señora. Estaba vestido con vestiduras blancas y se parecía a un obispo, con una pequeña mitra. Parecía estar predicando y sostenía un libro abierto en su mano izquierda. Los testigos observaron la Aparición bajo la lluvia torrencial durante dos horas, recitando el Rosario. Aunque ellos mismos estaban saturados, ni una sola gota de lluvia cayó sobre el hastial o la visión.
Junto a las figuras y un poco a la derecha, en el centro del aguilón, había un altar grande y sencillo. Sobre el altar se paraba el Cordero mirando hacia el oeste y tras el Cordero se erguía una gran cruz. Los ángeles revolaban en torno al cordero durante toda la aparición. No se pronunció ni una sola palabra. Los quince videntes presenciaron la aparición por 2 horas durante la lluvia y recitando el Santo Rosario. Las personas que no estaban en el sitio de la aparición informaron que vieron una luz brillante que iluminaba el área donde estaba la iglesia. Al día siguiente, muchos de los aldeanos fueron al sacerdote e informaron sobre la aparición.
Se corrió la voz y los peregrinos llegaron a Knock por miles. En 1880, se erigió una estatua de Nuestra Señora de Knock donde ocurrió la visión. Se han informado muchas curaciones y la Iglesia señaló que la aparición fue probable en 1971. Muchos de los enfermos fueron sanados al visitar la iglesia en Knock.
Investigación
En1879, solo seis semanas de la aparición, la comisión fue establecida por el arzobispo de Tuam, John MacHale. Los quince testigos fueron examinados y la comisión reportó que el testimonio de todos, tomados juntos, era confiable y satisfactorio.
En 1936, el Arzobispo Gilmartin formó otra Comisión para examinar los 3 videntes sobrevivientes: Mary O’Connell (Mary Byrne), Patrick Byrne y John Curry. Los tres confirmaron sus declaraciones originales de 1879. La Sra. O’Connell dio prueba, bajo juramento y al final añadió: «Estoy bastante clara sobre todo lo que he dicho y yo hago esta declaración ahora sabiendo que voy a estar con Dios.«
El resultado de esta comisión fue que la evidencia de los testigos era recta y confiable. En cuanto a la Señora O’Connell, se reportó que ella dejó una impresión muy favorable en sus mentes.
Algunos Datos:
- Knock es el santuario nacional de Irlanda, en el condado de Mayo, Oeste de Irlanda.
- En 1976, una nueva iglesia fue dedicada a Nuestra Señora
- S.S. Juan Pablo II hizo una peregrinación a Knock, visitando el santuario el 30 de septiembre de 1979, conmemorando el centenario de la aparición dándole la aprobación de la Santa Sede. Refiriéndose a Ella como Nuestra Señora del Silencio
- La Madre Teresa de Calcutta visitó el santuario en Junio de 1993. Un millón y medio de peregrinos lo visitan anualmente.
- Peregrinar a Knock es caminar por los elementos básicos de nuestra fe. El centro de todo está la Santa Misa y la confesión. También se hacen las estaciones de la Cruz, muchos rosarios y tiempo de oración.
- Hoy en día y cada año Knock recibe a un millón y medio de peregrinos.
Interpretación
Sobre la interpretación de la visión, estudiosos del tema se han referido a las palabras del Libro del Apocalipsis, en estos términos que transcribimos a continuación:
‘Mira que estoy de pie a la puerta y llamo’ (Ap. 3,20). El verbo en inglés ‘to knock’ significa ‘llamar’. ‘Si alguien escucha mi voz y abre la puerta entraré a su casa y cenaré con él y él conmigo’, escribe San Juan en el Apocalipsis (Ap. 3,20). Esto nos dice la Escritura, y esto nos sugiere también la lectura de los tiempos que estamos viviendo. Jesucristo llama a la puerta de nuestro corazón, llama al umbral de nuestra vida, y espera que lo dejemos entrar para poder cumplir sus promesas.
Mensaje San Juan Pablo II en la conmemoración de los 100 años.
“He sentido un profundo deseo de venir aquí, el deseo de realizar otra peregrinación al Santuario de la Madre de Cristo, la Madre de la Iglesia, la Reina de la Paz. Que no os sorprenda este deseo mío. Ya en mi juventud y en mi país, han sido muy frecuentes para mí las peregrinaciones a los santuarios de la Virgen”.
Con estas palabras Juan Pablo II nos maravillaba en su homilía de Knock en su visita de 1979, centenario de una aparición muy especial. Él quiso marcarnos no sólo la presencia de María en ese lugar, sino el propósito y significado del mensaje. Cada venida de María tiene un sentido distinto, especial y adaptado a cada circunstancia y cada lugar. Ella, enviada por su Hijo, sabe bien lo que necesitamos en cada momento de nuestra historia. Y en este caso quiso manifestarse junto a su esposo terrenal, San José, y a San Juan Evangelista, el discípulo tan amado por Jesús.
José, símbolo del heroísmo en la pureza, y Juan, signo extraordinario de la elevación espiritual, de la fe puesta en forma de pasión y amor. Juan y José unidos, uno como Sacerdote, Obispo y Evangelista, y el otro acompañando a su esposa, la Madre de Dios. Pero también la aparición estuvo iluminada por la presencia angelical, como símbolo del acompañamiento del ejército de Dios, que no deja de adorar y rodear al Verbo.