Apariciones marianas
Las llamadas «apariciones» o manifestaciones de la Virgen María son fenómenos que suceden a lo largo de la historia de la Iglesia. La Iglesia católica ha reconocido muy pocas, y aún estas son consideradas «revelaciones privadas», dejando a los fieles en libertad de creer en ellas o no.
En la teología católica, las apariciones marianas ayudan en la medida en que motivan a los creyentes a una vida coherente con su fe, y los mensajes remitan siempre a la Revelación Pública.
Dogmas Marianos (Dones o Atributos).
La Virgen se ha manifestado a videntes y personas que han recibido revelaciones y mensajes. Junto con eso, han habido momentos en que Obispos, Cardenales y Papas se han detenido a reflexionar y pedirle a Dios que nos ayude a comprender sus misterios, en particular los relacionados a la Virgen María y mucho de lo que hoy afirmamos sobre la Virgen María, nace de estas reuniones, los Concilios. Las advocaciones de la Virgen María que no corresponden a apariciones terrenales y son veneradas en múltiples países se mencionan como Dogmas Marianos (dones o atributos), teniendo algunas un lugar específico de veneración.
Imágenes Marianas
La iconografía mariana es la representación en iconos o imágenes de la Virgen (en pintura o escultura), mientras que a la arquitectura corresponden las iglesias marianas y otros edificios religiosos (monasterios, conventos) dedicados a las diferentes advocaciones de la Virgen.
María, la madre de Jesús, recibió desde los primeros siglos una veneración especial, cuya conexión sincrética con las representaciones iconográficas de las diosas madre mediterránea se ha sugerido que contribuyó de forma importante a la difusión del cristianismo y su éxito popular.